Con los ojos cerrados y la boca cerrada.
Sus dedos se clavan en los puntos de tensión de mi espalda.
Todo lo que yo sé sobre el dolor se ha reducido a una respiración entrecortada y espasmos esporádicos.
(-No eres tanta cosa como para ser mi lecho de muerte.
-Te he hecho morir mil veces).
Con los ojos cerrados y la boca abierta.
Suena el teléfono.
-Soy yo. Hablo para pedirte una disculpa. Todo lo que pasó ayer no debió haber pasado. Sé que has estado mejor y con lo que hicimos ayer, para ti debe ser muy difícil. Creo que es mejor que no nos volvamos a ver. Suerte.
Con los ojos cerrados, la boca abierta y el corazón impotente.
Sé que ya no estás al otro lado de la linea.
El teléfono, inquieto por tu ausencia, me obliga a colgar también.
Con los ojos abiertos y la boca cerrada.
El cielo de un color raquítico. La primera nausea de la mañana.
Sus dedos se clavan en los puntos de tensión de mi espalda.
Todo lo que yo sé sobre el dolor se ha reducido a una respiración entrecortada y espasmos esporádicos.
(-No eres tanta cosa como para ser mi lecho de muerte.
-Te he hecho morir mil veces).
Con los ojos cerrados y la boca abierta.
Suena el teléfono.
-Soy yo. Hablo para pedirte una disculpa. Todo lo que pasó ayer no debió haber pasado. Sé que has estado mejor y con lo que hicimos ayer, para ti debe ser muy difícil. Creo que es mejor que no nos volvamos a ver. Suerte.
Con los ojos cerrados, la boca abierta y el corazón impotente.
Sé que ya no estás al otro lado de la linea.
El teléfono, inquieto por tu ausencia, me obliga a colgar también.
Con los ojos abiertos y la boca cerrada.
El cielo de un color raquítico. La primera nausea de la mañana.
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